QUIÉNES SON LOS CULPABLES DE LA CRISIS DE LA GASOLINA

"El pueblo somos todos y cada uno de los que hacemos vida en nuestro país, independientemente del rol que desempeñemos en la sociedad".

"Estoy segura que un día, muy cercano, cuando seamos dignos de las bendiciones de DIOS, haremos de nuestro país una gran nación, porque solo con sacrificio y esfuerzo se valoran mejor las oportunidades, siempre que no nos olvidemos de las lecciones del pasado".

QUIÉNES SON LOS CULPABLES DE LA CRISIS DE LA GASOLINA

DE QUIÉN ES LA CULPA?

DE LAS SANCIONES O DEL GOBIERNO

El pueblo venezolano ha vivido desde la experiencia todas las consecuencias negativas de las variables micro y macro económicas y de los efectos colaterales de las políticas internacionales. Mientras políticamente todos los actores de esta obra de teatro ejercen su papel y actúan según sus intereses, los únicos afectados son aquella parte del pueblo más vulnerable. Por un lado, la guerra política interna por conquistar el poder y por el otro, la posición política internacional que más que sancionar a los políticos terminan castigando a un pueblo desvanecido de tantos golpes y, lo peor aún, una sociedad corrompida donde los valores que predominan es el egoísmo y la viveza para aprovecharse de las oportunidades y beneficiarse de la necesidad y del dolor de su prójimo. 

Hoy día se suma al calvario del pueblo la crisis de la gasolina caracterizada por escasez y aumento significativo en su precio; convirtiéndose en un viacrucis para los venezolanos quienes han tenido que someterse a las penurias más fuertes que hayamos podido imaginar. 

Al caminar hacia mi casa, bajo el inclemente sol, me preguntaba:

Quiénes son los responsables ???  En qué momento nos perdimos en el camino para llegar a este fatal destino?.  

Mirando en retroaspectiva no puedo evitar recordar aquel suceso fatal del famoso Caracazo (1988), hace más de 32 años, cuando el pueblo se reveló contra el aumento de la gasolina, el cual era una de las medidas económicas impuestas por aquel gobierno de turno. Allí comenzó el problema de la gasolina. Ya en ese entonces los responsables de la gestión del gobierno advirtieron que no era posible seguir subsidiando la gasolina y tomaron la decisión de ajustar el precio para corregir los problemas de déficit fiscal y además para cumplir las exigencias de los financistas internacionales (FMI y el BM) para que fuera posible la concesión de nuevos financiamientos para el país. Quizás el error de aquel gobierno fue no haber tomado en cuenta al pueblo para sumar voluntades y contar con ellos para los cambios que se iniciaban. Luego, al transcurrir el tiempo se posicionó una nueva ideología que logró introducirse gracias a que la democracia permitió, con el derecho al voto, ejecutar el castigo de valorar negativamente a quien lo hizo mal y premiar con una oportunidad de gobernar a quien brindó la expectativa de un futuro mejor. Desafortunadamente, quiénes han ejercido la política han sido dignos ejemplos del arte de la demagogia y quienes han tenido buenos ideales se han rodeado de gente inescrupulosas, incapaces e incompetentes. 

El mayor error cometido a lo largo de estos últimos 22 años fue haber ejercido un estilo populista, ejerciendo una ideología  pseudosocialista, acostumbrando a buena parte del pueblo a vivir de las dádivas que por mucho tiempo podían otorgarse mientras la industria petrolera fue la fuente de grandes riquezas para el país . La gallina de los huevos de oros era tan generosa que había para satisfacer las necesidades de todos; para subsidiar la ineficiencia de la administración pública, para pagar los compromisos de deuda interna y externa, para políticas sociales y hasta para la corrupción. 

La mayor ineptitud fue no haber tomado las previsiones de cuidar, mantener y repotenciar debidamente la industria petrolera para garantizar que su producción fuera continúa y próspera. Entonces, veo con claridad que uno de los culpables de esta tragedia son los que estando en cargos de responsabilidad no ejercieron su rol correctamente, advirtiendo y ejecutando las decisiones acertadas para garantizar que la producción de petróleo y sus derivados no se destruyeran al punto de ser hoy día un país sin producción petrolera. Qué ironía¡¡ llegar a este punto, siendo el país con mayor reserva mundial en lo que es conocido como El Oro Negro.

Peor aún, todos estos gobernantes debieron haber hecho caso a lo que el ilustre Arturo Uslar Pietri advirtió hace más de 35 años en su frase “DEBEMOS SEMBRAR EL PETRÓLEO”, aludiendo a que los recursos obtenidos por la industria petrolera debían ser invertirlos en otras opciones que generaran nuevas fuentes de ingresos y diversificarán los riesgos del país. Y pensar que el mundo está innovando en otras fuentes de energía alternativas y que con seguridad en algún momento del tiempo, El Oro Negro dejará de ser tan valorado. 

Por otra parte, las posiciones políticas internacionales han aplicado sanciones que más que afectar a particularidades, han terminado castigando despiadadamente a quienes menos culpa tienen en esta historia, a la gran parte del pueblo que hoy día están sumergido en el peor infierno jamás vivido.  

Y finalmente, otro culpable en esta historia está representado en aquella parte del pueblo corrompido por la miseria humana que toma provecho de las oportunidades de negocio que propicia la escasez y que no tienen consciencia del daño que ello causa, cuando el costo de los alimentos contiene en su precio los costos trasladados de la corrupción y el bachaqueo de la gasolina. Si le preguntan a un distribuidor de alimentos el porqué la mercancía llegó más cara que la última vez, su repuesta es: el precio en el mercado negro de la gasolina y luego toda la mercancía que fueron perdiendo a lo largo del trayecto cuando pasaban por los diferentes puntos de control. Entenderán estos participantes de nuestra sociedad que a quien están perjudicando realmente es al pueblo que, de paso, ellos también representan. Definitivamente hay que despertar muchas consciencias y buscar a DIOS en el corazón para discernir entre el bien y el mal. 

Si me preguntaran cuando nos perdimos del camino para llegar a donde estamos hoy, les diré: todo empezó hace más de 22 años, cuando ese pueblo herido y frustrado fue a ejercer su derecho al voto castigando a lo que creían malo y confiando en solo un líder político que tristemente se rodeó de muchos demonios que le dieron malos consejos y así, nos perdimos del camino de DIOS.